La vida universitaria es muy ajetreada con clases, búsqueda de prácticas y exámenes parciales. Durante este periodo, los jóvenes se ven obligados a buscar prácticas, un trabajo estudiantil o un programa de estudio y trabajo para mantenerse o adquirir experiencia que enriquezca su currículum. Obviamente, este proceso no es fácil, y deben desarrollar una red de contactos que les ayude en su búsqueda. Por lo tanto, es importante crear, desarrollar y mantener una red profesional. Esta es la clave para ganar visibilidad, acceder a más oportunidades y colaborar. Estas son ventajas innegables del networking, si se lleva a cabo de forma eficaz.

 

El atractivo del networking es bien conocido, pero los jóvenes pueden no saber por dónde empezar ni cómo abordarlo. Afortunadamente, existen medidas que puedes tomar para construir y desarrollar tu red profesional.

 

Creando una red profesional

Los estudiantes pueden empezar a construir sus redes de contactos utilizando diversos medios y herramientas que facilitan los encuentros profesionales. Entre las herramientas que pueden aprovechar se encuentra LinkedIn, además de los foros escolares y las asociaciones de exalumnos, conocidas como Alumni. Conocer a un profesional en un intercambio informal suele ser una experiencia relajada y sin estrés. Es una entrevista informal, pero puede ser decisiva para una futura carrera profesional.

 

Generalmente, los estudiantes jóvenes empiezan a crear redes de contactos cuando buscan prácticas o se incorporan al mundo profesional . Es entonces cuando se dan cuenta de la importancia y la utilidad del networking. De hecho, una buena red de contactos puede ser eficaz para encontrar prácticas, un trabajo estudiantil o un empleo estable. No esperes a que llegue el último momento; más bien, sé proactivo y activa algunas palancas con antelación.

 

Networking para más oportunidades

El networking es fundamental para un estudiante, ya que le permite acceder a todos los rincones del mercado laboral, especialmente donde las ofertas y oportunidades más interesantes se esconden y solo se puede acceder a ellas mediante recomendaciones. También es una forma eficaz de conocer a varias personas, lo que le permite comprender las profesiones, las trayectorias profesionales y las experiencias útiles para desarrollar mejor su proyecto profesional .

 

Creando una red profesional

Para contactar, es necesario poder iniciar una conversación y romper el hielo. Para un estudiante, se recomienda contactar con profesionales mediante un enfoque de investigación, preparando preguntas con antelación y estudiando sus perfiles previamente. Esto permite un intercambio cualitativo, que estos profesionales valorarán. No se trata de un enfoque oportunista, ya que si bien el estudiante debe construir su red de contactos, también es una oportunidad para que estos profesionales conozcan a la generación que estará activa en el mercado laboral dentro de unos años. Sin olvidar que el intercambio será tan gratificante como placentero para la otra parte, que podrá hablar libremente sobre su trayectoria profesional.

También es importante que la conversación fluya después de empezar. Para las personas tímidas, esto puede ser un poco complicado, así que debes prepararte practicando tu discurso de presentación, por ejemplo. Después, la conversación fluirá con más naturalidad y no dudes en tomar notas durante la misma. Después de la entrevista, sería muy útil enviar un mensaje al profesional para agradecerle su tiempo y sus consejos. Esta cortesía puede ser muy beneficiosa y es una forma de mantenerse en contacto de cara a futuras reuniones oficiales. Es recomendable mantener un directorio de las personas que has conocido para construir tu red de contactos de forma gradual. No dudes en seguirlos en LinkedIn, que es una red profesional muy efectiva.

¿Por dónde empezar?

El networking de un estudiante será más fácil y efectivo si comienza con su círculo más cercano, como profesores y personal docente, antes de pasar a las empresas. El networking inmediato puede ser una buena puerta de entrada y un vehículo real para construir su red de contactos. No dude en recurrir a familiares, amigos, profesores y otros contactos inmediatos. Estos pueden poner al joven en contacto con buenos contactos que pueden ser útiles en su carrera. Aprovechar la colaboración de antiguos alumnos, asociaciones de estudiantes y empresas junior puede ser una mina de oro para compartir experiencias entre estudiantes. De hecho, los exgraduados, por ejemplo, pueden ofrecer consejos y sugerencias para ampliar la red de contactos y aprovechar todas las oportunidades posibles. El periodo de estudios es el mejor momento para desarrollar la red profesional, ya que está a medio camino entre el aprendizaje y la práctica.

También vale la pena aprovechar la oportunidad de obtener una recomendación, ya que esto puede abrirte muchas puertas y establecer nuevos contactos profesionales. Puedes conseguirla usando tus contactos de LinkedIn, por ejemplo. Para tener éxito, debes demostrar profesionalismo para construir una red de contactos sólida y confiable.

Ya sea un primer contacto, una entrevista informal o una reunión formal, es fundamental adoptar el tono adecuado. Los intercambios deben ser relevantes e informativos, sobre todo porque los contactos son personas activas con agendas apretadas. Se recomienda abordar el networking de forma desinteresada para evitar decepciones si la respuesta es tardía o negativa. Es recomendable hablar de la actualidad o de las actividades de la empresa antes de hablar de tu plan de carrera. Una vez establecido el contacto, el estudiante puede explicar su búsqueda de prácticas, un programa de estudio y trabajo o un empleo. Sobre todo, evita hablar de ello desde el principio.