Ya sea para un trabajo temporal para pagar la universidad o para un puesto permanente, las entrevistas de trabajo pueden ser una experiencia traumática. Al graduarte, muchos amigos te aconsejarán sobre la actitud correcta durante una entrevista. También te aconsejarán sobre lo que no debes hacer. Aquí tienes algunos errores que debes evitar.

No parezcas desesperado

Llevas tiempo buscando trabajo, tanto que estás dispuesto a aceptar cualquier cosa. Incluso si es así, es importante que no lo demuestres. Debes dar lo mejor de ti durante la entrevista, y parecer desesperado creará una impresión negativa en el reclutador. Si mencionas que aceptarás cualquier oferta, darás la impresión de que te subestimas. También parecerás tener una idea vaga de la estructura de la empresa y no haber investigado lo suficiente. Esta mentalidad no es apreciada por los empleadores. Estarán más interesados ​​en saber si tienes talento y qué puedes aportar a la empresa u organización.

No llegues tarde

Una de las mejores maneras de causar una mala impresión es llegar tarde a una entrevista de trabajo. Esto envía una muy mala señal al empleador. Llegar tarde refleja poca capacidad de organización e incluso falta de interés en la empresa. No hay una fórmula mágica para evitar llegar tarde. Debes consultar la ruta a la entrevista con suficiente antelación y salir temprano por si hay problemas de tráfico. Si vas en coche a la entrevista, infórmate sobre la disponibilidad y la ubicación del aparcamiento.

No aceptes cualquier salario

No te dejes engañar por un empleador que podría aprovecharse de tu inexperiencia para ofrecerte un salario inferior al que indican tus cualificaciones. No dudes en ofrecerte a negociar. Esto demostrará cierta confianza y seguridad en ti mismo que impresionará al reclutador.

Tratar a todos con respeto

Incluso si solicitas un puesto importante y prestigioso, nunca debes menospreciar a tus subordinados. Esto puede dar la impresión de que no eres la persona adecuada para reunirte con clientes. Sé amable con todos los que te saluden y con todos los que te encuentres de camino a la entrevista. La mayoría de las empresas tienen un ambiente de equipo y familiar, y debes demostrar que eres capaz de integrarte en él.

No hables mal de tu antiguo trabajo

Si ya has tenido un trabajo, es importante no subestimarlo. Es una forma segura de ser rechazado. Tu reputación profesional podría verse comprometida. Los empleadores no aprecian a los empleados que se arriesgan a dañar su reputación. En lugar de eso, enfatiza tu necesidad de nuevos retos y tus responsabilidades en tu anterior empleador.